Para el AAPPO (Asociación Argentina de Ping Pong con Obstáculos) era una noche muy especial. Por primera vez, después de casi 2 años de habernos autocreado, organizábamos un torneo oficial, abierto, plural, no sexista (ni antisexista) y festivo. ¿Qué hicimos hasta ahora? Bueno, durante estos casi dos años nos dedicamos a perfeccionar el deporte, a pulir detalles, a inventar variantes, a probar hasta dónde podía llegar. Pero hasta que no hiciéramos el primer torneo no lo sabríamos. Hoy tampoco lo sabemos, pero sí sabemos que pasamos una noche mágica, la noche del debut del Ping Pongo en el mundo. Repasémosla.
La previa de la previa
Ya la respuesta inmediata que tuvimos vía mail nos ilusionó. En un par de días de abierta la inscripción no había más cupo y los rezagados sólo se podían conformar con un indigno pero esperanzador lugar como suplentes. Nosotros nos ilusionamos también y empezamos a proponer boludeces para agregarle, como elegir al rey y la reina del ping pong con obstáculos y darles puntos extra, cosa que no prosperó. Pensamos el torneo, conseguimos la mesa, imprimimos certificados, hicimos sorteos, nos estresamos un poco y finalmente el torneo llegó.
La postpreprevia
Nuestro primer temor, que nadie viniera o llegaran a cualquier hora, fue rápidamente desmentido por la realidad. No sólo habían venido todos sino que lo habían hecho puntualmente. Les entregamos el certificado de asistencia, la placa y el clipcito; y todos se pusieron a entrenar. Por suerte sólo Frydman, adalid de la libertad económica, decidió que era demasiado libre para ir. El resto vinieron todos, “¡cuántos que son!” podríamos decir, subvirtiendo la clásica canción de cancha.
La ceremonia.
Arrancó la ceremonia inaugural, sin tanto colorido, ni Spice Girls ni danzas sincronizadas pero sí con un emotivo discurso del presidente del AAPPO, Juan Martín Gutiérrez, quien como siempre se fue por las ramas, pero que antes aclaró algunas cuestiones reglamentarias e intentó motivar a todos con palabras conmovedoras y sinceras sobre lo importante que era esto para el mundo y, ¿por qué no?, para nosotros.
La primera ronda
Yo mucho no pude ver porque estuve apegado a la dura tarea de actualizar resultados y armar los fixtures de la segunda ronda. Pero con lo que uno veía, ya se notaban algunos candidatos. En el grupo A, López Winne, que venía de ganar un torneo en Cuba, se imponía con tres triunfos ante la sorprendente Edelstein y Álvarez Montero, que clasificó miserablemente por “güolkouver”. En otros grupos, Completa y De Souza, los federados, ganaban sus partidos sin problemas pero a media máquina, temiendo meter once a ceros y ser repudiados por la comunidad ping pongoeera. Arias, desde Tres Arroyos, liquidaba sin piedad a Patrick Mills, le metía un 11 a 1 doloroso a nuestro Godinez Galay. Ya asomaba como candidato.Las chicas por su parte daban que hablar. Wainberg, con un estilo muy saltarín y vivaz le metió un histórico 11 a 0 a nuestro Zurita. La gente se rindió ante el poder sin contemplaciones de la contendienta y también ante la hidalguía de Zurita que reconoció la derrota a pesar de que a nadie le importaba que lo hiciera. Paula Moreno Frers, aún con su nombre cambiado, empezó a sorprender, y después de perder no sé qué partido, ganó el partido final a Guerrero, en un duelo que despertó suspicacias infundadas, y pasó a octavos de final. Juan Martín Gutiérrez, la gran esperanza del AAPPO de tener a un fundador arriba en el ranking fue sometido por el ucranio Alex Nemirovsky y empezó a mostrar hilachas, como una manera de distraernos de su opaca primera ronda. Buchanan por otro lado, daba el batacazo y le ganaba a nuestro Montanari. Los otros candidatos que aparecían eran Amicarelli, que ya no era más “el hermano de (Patricio)” sino “el padre de… (los que venció)” y el madridista Krikorián, que habían ganado sus tres partidos.
Octavos en adelante… la verdadera copa.
Pasaron los cuartos y llegaron las semis con 4 personas, lo cual estaba en nuestros planes. Ellos eran De Souza, Completa, Gutiérrez y Arias. Los primeros dos, federados y máximos candidatos, mostraron su gran calidad jugando entre sí. Dialogaron con los obstáculos y divirtieron a todos. Finalmente se impondría Completa. “El presi”, por su parte, estuvo lejos de su mejor nivel y arrancó 0 – 6 contra Arias. Terminó decorando el marcador sobre el final, para que quedara 7 a 11. Fue despedido con un emotivo cántico de “Héroe, igual”.Fue muy destacable que pocos eliminados se fueron. La mayoría se quedó a disfrutar de un buen pingpongo y a brindarnos su calor, a pesar de que no lo queríamos porque allí dentro la temperatura andaba por los treinta grados.Hubo dos partidos muy destacados en octavos de final. Nuestro Desiderato hizo una gran performance y perdió muy ajustadamente contra el temible López Winne 10-12. Otro gran partido se jugó en la cancha 1: El clásico Wanberg – Moreno Frers, que fue comparado por el Presidente del AAPPO con un capítulo de Dragon Ball y atrajo todas las miradas, no por razones lascivas sino por su gran calidad. Fue un partido luchado e inolvidable.Mientras, sigilosamente, Completa, De Souza y Arias avanzaban sin problemas.
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La Gran Final
Aquí el video con las semis y la final, en exclusiva.No sorprendió a nadie que Martín Completa llegara a la final. Y Arias, sabiendo que todo Tres Arroyos se había quedado despierta hasta las 5 de la mañana debido a la diferencia horaria, dio todo de sí. Pero la categoría de Completa se hizo sentir. La final fue el único partido a tres sets y eso también se notó… porque se jugó 1 set más: el segundo. Allí, o no me acuerdo cuándo, Completa hizo una jugada que quedará para siempre guardada en nuestro recuerdo, especialmente si no borramos el video. Luego de un ataque, el obstáculo en el campo rival se la devolvió, como tirando una pared. Martín, ni lerdo ni perezoso, ni amargo ni forro, ni desidioso ni canchero, ni deshonesto ni acelerado ni nada, volvió a impactar la bola, que otra vez pegó en el obstáculo para esta vez no volver. Todos, en ese momento mágico, nos miramos como diciendo “¿Viste? ¡Pegó en el obstáculo, volvió, le pegó de vuelta, pegó en el mismo obstáculo y se fue!”. No hacían falta más palabras. O quizás sólo dos más “¡Muy bueno!”.
La clausura
Martín Completa ganó también el segundo set y se llevó el Primer Abierto Nacional de Ping Pong con obstáculos. Invisiblemente emocionado, Martín recogió la copa que le entregó, muy carismáticamente, Álvarez Montero, y la ofreció al pueblo, para luego hacerle “oso” cuando el pueblo se la quisiera llevar. Está perfecto Martín, te lo merecés. También hubo espacio para entregarle la medalla al primer perdedor a Lucas Arias y entonar todos, silenciosamente, el himno al Ping Pong con obstáculos.
Fue realmente una noche inolvidable para nosotros. Más allá de los chistes, sepan que esto es de verdad: nos encantó organizar este torneo, nos encantó la buena onda y la magia que le pusieron todos, y nos encantó haber generado desde nuestras inquietudes poco ortodoxas una noche de felicidad pingpongoeira. ¡Gracias a todos! Y ojo, ¡en octubre volveremos!
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Y ahora unas pastillitas sobre lo mejor del torneo.
La indumentaria: El dragón de De Souza causó muy buenos comentarios, pero también se destacaron la indumentaria oficial de Kabaddi de Gutiérrez, la camiseta de Galatasaray de Mills, el look Post grunge de Kleine Samson y la camiseta retro chilena de Godinez Galay.
La revelación: Las chicas mostraron un gran nivel, especialmente Wainberg y Moreno Frers, pero también Edelstein tuvo buenos momentos. También fue destacable el partido que Desiderato le hizo a Completa y la aparición furibunda de Arias a pesar de haberse inscripto como suplente.
La generosidad: No se pudo entregar por cuestiones de tiempo, pero Agustín Sinibaldi quien se encargó de cuestiones técnicas a pesar de haber perdido 3 partidos al hilo se mereció el diploma Hermanas Mosso (Gracias a su vez a Evita y Sole por prestarnos la mesa!!!) a la generosidad deportiva.
El árbitro: Desiderato se ganó por derecho propio (no se movió de la silla durante 1 hora) el arbitrar en los partidos clave y no defraudó. Se mantuvo al margen, aplaudió, tomó cerveza y dio todo lo que un árbitro puede dar en un evento como este.
La decepción: Hubo varios. Cuatro de los fundadores mostraron un nivel realmente malo (Godinez, Gronda, Montanari y Zurita), pasando más papelones de los previstos, aunque lo compensaron desde la organización. Shokida prometía más desde nuestro prejuicio y estigmatización, pero al menos ganó un partido por Walkover y nos enseñó la lección de que no hay que juzgar hasta que el árbitro no pite el final del partido. Así que en realidad no hubo.
Las promesas: Quizás el sorteo no los ayudó pero Guerrero, Nemirovsky y Krikorian demostraron que pueden hacerle fuerza a las estrellas del pingpongo mundial.
El obstáculo: Hubo varios. Pero los rastis coloridos de Juli, la hija del presi, le taparon la boca a más de uno. Buenos rebotes, buena resistencia.. le dieron el color justo.
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